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Muchos de los casos de robo de identidad comienzan con la pérdida o hurto de una cartera o billetera

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El I.I.I. ofrece información para proteger su identidad y sobre la cobertura disponible para ayudar a víctimas en algunos casos de este delito

INSURANCE INFORMATION INSTITUTE
Oficina de Prensa
New York: 212-346-5500; media@iii.org
Elianne Gonzalez, Florida: 954-389-9517 o 305-407-4305

NEW YORK, 26 de febrero de 2009 — Un delito de baja tecnología como el robo de una cartera o billetera puede desembocar en un crimen de alta tecnología, indicó el Information Institute (I.I.I.).

Un 43% de todos los casos de fraude de identidad en los Estados Unidos en el año pasado comenzaron con una cartera perdida o robada, y un 13% de esos casos fueron atribuidos al uso abusivo de data financiera por parte de una persona conocida (amigo, familiar o empleado domestico), según indica la encuesta recientemente publicada titulada (Encuesta de Fraudes de Identidad de 2009) de Javelin Strategy & Research. La misma encuesta revela que durante períodos de dificultades económicas los ladrones son más propensos a usar documentos de identidad para hacerse pasar por una víctima, robar de sus cuentas bancarias, establecer pólizas de seguros fraudulentas o abrir una cuenta de crédito a su nombre sin autorización.

Otra forma en que los estafadores pueden robarle la identidad a los consumidores es una estafa que en inglés se conoce como phishing, o “pesca” de la información usando correos electrónicos maliciosos que piden información personal haciéndose pasar por empresas legítimas que pudieran tener contacto con los consumidores como bancos, empresas financieras o aseguradoras, de forma que las victimas provean de su información financiera privada. Otras veces la información robada proviene de bases de datos de empresas que guardan información de los clientes y estas se ven comprometidas de forma que los criminales obtienen acceso a la data personal de los clientes.

“Para ayudar a los consumidores a restaurar su identidad, un creciente numero de aseguradoras ofrecen cobertura contra el robo de identidad”, dijo Michael Barry, vicepresidente de relaciones con los medios del I.I.I. “Las aseguradoras entienden que recuperarse del crimen del robo de identidad puede ser costoso y requiere una inversión muy grande de tiempo”.

Algunas aseguradoras incluyen una cobertura de seguros contra el robo de identidad como parte de la póliza de propietarios de vivienda o de inquilinos, como un endoso para cualquiera de estas, o inclusive puede obtenerse como una póliza por separado, indicó Barry.

El seguro de robo de identidad a menudo cubre los costos de retener los servicios de un especialista en fraudes que asista y guíe al portador de la póliza a través del proceso de restaurar su identidad. Las víctimas de este crimen pudieran gastar meses en lograr arreglar los registros de crédito y entre tanto pueden encontrar muy difícil conseguir prestamos, obtener tarjetas de crédito, financiamiento y en ocasiones hasta empleo. Algunas pólizas pueden proveer cobertura para rembolsar al asegurado los gastos asociados con el proceso de restauración de la identidad de la persona afectada, tales como los gastos de llamadas telefónicas, horas de trabajo y pérdida de salarios o ingresos, costos de servicios de notario y de envíos certificados de correspondencia, y bajo ciertas condiciones, servicios legales o de representación de abogados (con la aprobación de la aseguradora).

“Los consumidores deben revisar con mucho cuidado sus facturas de tarjetas de crédito y estados de cuentas bancarios para asegurarse que no hay cargos que no hayan realizado o no les pertenecen”, recordó Barry. De hecho, la FTC indica que más de la mitad de las víctimas del robo de identidad lo descubrieron gracias a que monitoreaban sus cuentas.

El I.I.I. tiene las siguientes recomendaciones para ayudarle a proteger su identidad:

  • Mantenga al mínimo la información personal en su cartera o billetera. Evite llevar muchas tarjetas de crédito y sólo porte su tarjeta de seguro social o su pasaporte cuando sea absolutamente indispensable.
  • Resguarde su tarjeta cuando realice las compras. Escude con la mano la pantalla de las máquinas procesadoras cuando realice compras con su tarjeta de débito, cuando use el cajero automático, o cuando use su tarjeta de crédito para llamar por teléfono.
  • Conserve los recibos de los telecajeros y de sus compras con tarjeta de crédito. No deseche estos en basureros públicos, no los deje en el mostrador de la tienda, ni los guarde en la bolsa de compras ya que pueden perderse fácilmente o caer en manos inescrupulosas.
  • Proceda con precaución cuando realice compras en Internet. Asegúrese de que hace compras con un proveedor de buena reputación y en una red segura.
  • Monitoree sus cuentas. No se confíe sólo en su compañía de tarjeta de crédito o su banco para recibir alertas de actividades sospechosas en sus cuentas. Vigile cuidadosamente sus cuentas y revise las facturas y estados de cuenta que reciba para asegurarse de la exactitud de todas las transacciones.
  • Solicite una copia de su informe de crédito de cada una de las tres agencias crediticias nacionales. Gracias a la nueva ley que entró en vigencia en diciembre de 2004, usted tiene el derecho de recibir un informe de su crédito anualmente de forma gratuita. Asegúrese de que todas las actividades mencionadas usted las autorizó o reclame su corrección. Las tres principales oficinas de archivo de crédito (credit bureaus) son , y ..
  • Cuando seleccione claves y nombres para sus cuentas de crédito, bancos o el teléfono evite usar información de fácil acceso como su fecha de nacimiento, parte de su número de seguro social, el nombre de soltera de su mamá, etc.
  • No divulgue su información personal por el teléfono, por correos electrónicos o usando la red a menos que usted inicie la conversación y esté seguro del uso que se le dará a esa información y que se este usando una línea de intercambio segura.
  • Triture, destruya, pulverice, sus papeles de desecho. Triture o rompa en pedazos pequeños cualquier documento que contenga su información personal tales como tarjetas de crédito, estados bancarios, recibos o solicitudes de tarjetas, antes de tirarlos a la basura.

Si tiene preguntas específicas sobre el seguro de robo de identidad, contacte a su aseguradora o representante. Para más información sobre este u otros seguros, visite la sección En Español del sitio Web del I.I.I.

Para combatir el robo y fraude de seguros, así como el robo de identidad, los consumidores pueden contar con la Oficina Nacional contra el Crimen de Seguros o (NICB). Si sospecha de fraude o robo puede contactar al NICB de forma anónima e inclusive calificar para una recompensa, usando la línea telefónica gratis 1-800-TEL.NIBC (1-800-835.6422).

Si desea conocer más sobre como evitar y lidiar con el robo de identidad, por favor visite la página sobre del FTC. La versión para el consumidor del estudio Javelin está disponible .

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